Como cada año, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) ha publicado su informe del Estado mundial de la agricultura y la alimentación, siendo titulado este 2021 como “Lograr que los sistemas agroalimentarios sean más resilientes a las perturbaciones y tensiones”, esto tras los obstáculos y vulnerabilidades presentes durante la pandemia del COVID-19.
El informe define las perturbaciones como “desviaciones de breve duración de las tendencias a largo plazo que tienen efectos negativos sustanciales en un sistema, el estado de bienestar de las personas, los activos, los medios de vida, la seguridad y la capacidad de soportar perturbaciones futuras”, siendo los fenómenos meteorológicos extremos, enfermedades y plagas ejemplos de perturbaciones.
En el informe se presentan indicadores nacionales de la resiliencia de los sistemas agroalimentarios en más de 100 países y se analizan factores como las redes de transporte, los flujos comerciales y la disponibilidad de dietas saludables y variadas.
Entre las recomendaciones que ofrece la FAO de acuerdo con datos empíricos del informe, se encuentra la diversificación de fuentes de insumos, producción, mercados y cadenas de suministro; una mayor conectividad entre las fuentes de suministro, canales de transporte, comercialización, insumos y mano de obra, para minimizar las perturbaciones que pudieran presentarse.
Conocer el informe completo:
FAO. 2021. El estado mundial de la agricultura y la alimentación 2021. Lograr que los sistemas agroalimentarios sean más resilientes a las perturbaciones y tensiones. Roma, FAO.
https://doi.org/10.4060/cb4476es